Todos los whovians somos como esa pequeña Amy Pond que esperó al Doctor sentada en el jardín de su casa, queremos soñar con la llegada de esa TARDIS que nos saque de la monotonía de nuestras vidas y nos haga vivir las más increíbles aventuras. Pero ayer miércoles 27 de julio de 2016 nos cansamos de esperar y fuimos nosotros quienes nos fuimos en busca del Doctor porque una pista sobre su paradero a principios de esta semana nos hizo dar un brinco inesperado a todos los fans españoles. Y es que el lunes, a través de una foto que publicó la cuenta oficial de Doctor Who, supimos que Peter Capaldi y Pearl Mackie estaban en Valencia rodando el segundo episodio de la próxima temporada en la Ciudad de las Artes y las Ciencias. Teníamos que intentar verlos ya que estaban tan cerca.
El mismo lunes por la tarde a través de las redes sociales nos enteramos de que unos amigos de la asociación Alicantardis que habían cogido el coche y subido a Valencia casi sin pensarlo habían conseguido ver a ambos actores y fotografiarse con ellos, además de poder intercambiar unas palabras. Aquello fue mágico para ellos y para nosotros que estábamos en casa porque, a pesar de querer poder vivirlo en nuestras carnes también, nos alegrábamos mucho por ellos porque era a buen seguro un momento muy emocionante y emotivo, además de comenzar nosotros a sentir que aquello era posible. Al día siguiente, martes, fueron otros amigos de la misma asociación quienes marcharon a Valencia en busca del Doctor y se alzaron vencedores también. Comentándolo por Whatsapp con todos ellos fue cuando se me pasó por la cabeza un "¿y si...?" y también casi sin pensarlo tomé la decisión de liarme la manta a la cabeza y marchar a Valencia al día siguiente. Ya sabéis cómo acabó todo a juzgar por el título de este post, pero pasé muchos nervios durante la noche dándole vueltas a todo, temiendo ir para nada porque se hubieran marchado o porque no lográramos encontrarlos o incluso porque hubiera tanta gente que fuera imposible conseguir nada. Prácticamente no dormí, di vueltas en la cama, incluso le daba vueltas a qué carretera coger, a qué hora salir de Alicante, qué llevarme, dónde comer, etc. En fin, todo un cúmulo de cosas que me hicieron pasarlo mal, pero de las que ahora me río.
Salimos de Alicante sobre las 9 y algo. A las 11 y 20 llegamos y aparcamos en la Ciudad de las Artes y las Ciencias. No lo sabíamos entonces, pero justo encima de donde dejamos aparcado el coche estaban Peter Capaldi y Pearl Mackie grabando unas escenas en los jardines del Umbracle. El caso es que al salir del parking aquello era inmenso. Nos dirigimos al Hemisferi y parte trasera del Museo de Ciencias, pues por allí habían estado los días anteriores. No vimos nada, ni gente, ni cámaras, ni nada de nada. Dimos un buen paseo por allí sin éxito. Al final, desesperados y ya pensando en que habíamos hecho el viaje en balde, volvimos al punto de inicio, pregunté en Información y me dijeron que estaban arriba, en el Umbracle. Era justo subir las mismas escaleras por las que habíamos bajado al salir del parking. Nada más llegar arriba, ¡premio! Había a lo lejos una pequeña multitud de fans que, conforme nos acercamos, nos dimos cuenta de que estaban con Pearl Mackie, la nueva acompañante del Doctor.
Fue prácticamente llegar y besar el santo, bueno, a la companion, porque sí, había tan poca gente con ella en ese momento que pudimos hablarle tranquilamente, darle dos besos y pedirle que nos firmara los muñecos Pop! que habíamos comprado corriendo la tarde anterior. En ese momento ya se me quitaron todos los miedos, habíamos ido allí y ya habíamos conseguido algo muy importante. Nos quedaba el Doctor, desde luego, pero ya teníamos la certeza de que estaba allí, de que había merecido la pena pegarse el viaje para ir allí. Unos minutos más tarde la multitud pegaba un grito ahogado, Capaldi acababa de salir y se dirigía a ellos a firmar autógrafos y hacerse fotos. Hacía mucho calor y un sol de justicia nos pegaba a todos y allí estaba aquel hombre con la gabardina de terciopelo puesta y atendiendo a los fans hasta que unos muchos minutos más tarde lo llamaron los de producción para marcharse a descansar. Hicimos "cola", esperamos pacientemente nuestro turno, hubo gente que se coló, y justo cuando ya estábamos delante de él y nos quedaban antes dos personas a los lados por atender antes que a nosotros se tuvo que marchar y nos quedamos allí apenados.¡Casi lo conseguimos y nada más llegar a Valencia! La gente de producción nos dijo que por la tarde grabarían en el Hemisferi y que sobre las 6 de la tarde volvería a salir a atender a los fans. Nos tocaba quedarnos sí o sí porque había que intentarlo.
Comimos rápidamente en un McDonald's que había en el centro comercial de al lado. Si nos íbamos a quedar todo el día, teníamos que ser los primeros en la cola la próxima vez porque no podía volver a ocurrirnos lo de la mañana. Engullimos las hamburguesas (sí, me salté la dieta olímpicamente), descansamos lo justo para escribir unos mensajes en las redes sociales y volvimos al recinto sobre las 2 y pico de la tarde. Aprovechamos para hacernos fotos en el lugar donde habían estado rodando por la mañana y vimos unas cuantas maderas que habían estado empleando. Tras las fotos de rigor bajamos a donde se concentraba una pequeña multitud frente a las caravanas en las que estaban los actores descansando y por supuesto nos quedamos montando guardia. Probablemente estuviéramos allí una hora de plantón, a la sombra, eso sí, y entonces salió el Doctor de la caravana directo al grupo de fans.
Volvía a haber la misma gente que por la mañana y algunos volvían a colarse, los nervios eran mayúsculos, no las teníamos todas con nosotros y pensamos que nos ocurriría lo mismo de la mañana. Conforme nos íbamos acercando el corazón nos palpitaba más deprisa, nos dábamos órdenes entre nosotros en plan "primero le doy el muñeco para firmar y tú haces fotos de todo, ¿me oyes? de TODO. Luego me das tu móvil y te hago yo las fotos". Unos chicos que iban antes le dieron una foto para firmar, pero no tenían rotulador permanente, así que le di el mío a Capaldi, quien luego me lo devolvió con un "muchas grasias" que me dejó con una sonrisa tonta en la cara. Y sí, llegó el momento, me tocaba ya a mí, de hecho el propio Peter me quitó el muñeco y el rotulador de las manos para firmarlo. Yo no dejaba de darle las gracias en inglés. Luego vino la foto, me puso el brazo sobre la espalda. Yo estaba en una nube. Le di las gracias y me volví a meter en la muchedumbre, detrás de mi hermano, pues él todavía estaba esperando y tenía que hacerle las fotos. Él, muy caballerosamente, dejó pasar a unos chicos que querían darle unos regalos o un cuadro para firmar y entonces llegó su turno. Lo mismo, firmó el muñeco, le cogió de los hombros y foto. Salimos de allí alucinados, sin dejar de repetir "¡qué guay!" y la gente que también había salido contestarnos "¿verdad que sí?". Eran las 4 y poco de la tarde, lo habíamos conseguido.
Pocos minutos después Capaldi tuvo que marcharse al set de rodaje. Obviamente le perseguimos hasta que ya no nos dejaron pasar más. Los perdimos de vista a lo lejos, pero sabíamos que estaba allí junto a Pearl por las cámaras. Algunos, mucho más tarde, los vieron pasearse por el Hemisferi rodando una escena, pero nosotros ya nos habíamos marchado. Esperamos un poco a que llegaran unos amigos nuestros para saludarles y pensamos en quedarnos con ellos hasta que consiguieran su foto, pero estábamos muy cansados y, lo peor, quemados por el sol, así que decidimos marcharnos antes de que se hiciera más tarde, pues nos quedaban aun dos horas de coche por delante.
Y nos marchamos, físicamente hechos polvo, pero muy contentos y sin dejar de repetirnos que había merecido la pena. No nos lo creíamos, ni nosotros ni ninguno de los que a lo largo de estos cuatro días de rodaje se dejó caer por allí y consiguió su objetivo. Había sido todo tan inesperado y tan rápido que parecía un sueño, uno hecho realidad. Habíamos conocido al Doctor y a su acompañante y nos sentimos igual de ilusionados que aquella pequeña Amy Pond que le sirvió al Doctor natillas y palitos de pescado. Seguiremos soñando con que vuelva en su TARDIS para recogernos porque después de esto yo ya me creo que TODO es posible.
¡Hasta el próximo post!